Por Jesús Alberto Rubio.

Retomamos el tema:

Y es que la verdad, urge una respuesta:

Héctor Espino Jr. nos hace llegar una carta desde Monterrey sobre el abandono en que se encuentra la estatua de su señor padre, la que esr objeto de un vil vandalismo.

“Es una verdadera tristeza, que provoca fuerte coraje, las condiciones que está la estatua de mi padre.

Por ello, a través de este conducto les pido encarecidamente a las autoridades correspondientes, medios de comunicación, aficionados y amistades, a que apoyen esta demanda y exigencia de que se le dé su lugar y respeto a la escultura y recuerdo de Héctor Espino.

También me dirijo a la gobernadora Claudia Pavlovich solicitándole su intervención para que reubiquen la estatua, algo que hice con anterioridad, pero sin obtener respuesta.

Este llamado y exigencia es también para Genaro Enríquez, el director de la Codeson.

Es necesario reiterar que no es posible que la estatua esté en al abandono y a disposición del pandillerismo.

Incluso, me atrevo a señalar que el monumento merece estar donde nunca debió de haber salido, del estadio que lleva su nombre, pero finalmente he entendido que en su momento hubo cuestiones políticas de por medio.

Han de saber que nunca estuve de acuerdo que la removieran y así se lo hice saber personalmente al anterior gobernador.

En Chihuahua y aquí en Monterrey las estatuas de Espino están bien cuidadas y con su debido mantenimiento, por lo que no comprendo que sucede en el caso de Hermosillo.

No me lo explico. Se entiende que es en la capital sonorense donde se le tiene a Héctor Espino en un gran aprecio, respeto y reconocimiento por todo lo que aportó como pelotero y persona.

No es posible que se le tenga olvidado y con una estatua ya incompleta y en pésimas condiciones.

Les pido de favor no hagan caso omiso a mi petición, en nombre de mi madre y hermanos.

Hagamos algo… no dejen pasar el tiempo, autoridades, directivos.

No tengan en total abandono el recuerdo, la figura, la estatua del ícono del béisbol mexicano.

Gianco power

Clase de poder… Giancarlo Stanton apantalló sobremanera en el Derby con la mejor actuación vista hasta ahora en ese evento previo al Juego de Estrellas.

Sus 61 jonrones a través de tres fases, se convirtió ahora en la más alta cantidad de obuses en ese tipo de competencia.

La marca previa eran 41, establecida por el venezolano Bobby Abreu en el 2005.

Esta vez, el Marlin de Miami conectó trallazos que “aún no caen” y que fueron un deleite para todos los que le vieron conectar.

Realmente Giancarlo Stanton se robó el show, especialmente con sus 20 cuadrangulares en la final para derrotar al campeón defensor, Todd Frazier.

Gianca (como muchos le dicen), se vio como una máquina de conectar vuelacercas: en la primera ronda humilló 24-7 a Robinson Cano, mientras que en la semifinal se impuso 17-14 a Mark Trumbo; es decir, el nacido en California totalizó 61 palos de vuelta entera.

El concurso sufrió algunas modificaciones, destacando que esta vez los bateadores se rigieron por tiempo y no por outs en cada una de sus apariciones en el plato.

Debo destacar, aunque no creo que sea necesario señalarlo porque usted seguramente los vio-disfrutó en grande, Giancarlo pegó una de muy larga distancia, el mejor de todos, de 497 pies, imagínese.

http://m.es.mlb.com/video/topic/7709244/v923801683/stanton-hace-historia-con-su-prodigioso-poder-aqui

Hay mucha más tela de donde cortar con este Giancarlo, quien en campaña lleva 20 para la calle y 201 de por vida en su carrera ligamayorista que inició en el 2010.

Todd Frazier lleva 25 con Medias Blancas.

El líder con 28 en esa especialidad y también partícipe de la justa jonronil, es Mark Trumbo, de los Orioles (28).

No hay mánagers latinos

Buen ángulo: el comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, consideró extraño que no haya actualmente ningún manager latinoamericano en los 30 equipos, y reconoció que la diversidad étnica del país debería reflejarse de mejor manera en esos cargos.

“Llama la atención la ausencia de un manager latino”, dijo.

En mayo, los Bravos de Atlanta despidieron al cubano Fredi González, último piloto latinoamericano que continuaba en las mayores. Brian Snitker lo sustituyó de forma interina.

“Hay 30 puestos, 30 empleos de alta rotación cuando se habla de los managers, y debería haber un mayor vaivén en términos de diversidad”, indicó Manfred.

Así es.

Habiendo tanto jugador en activo, como en otras diversas funciones, es raro que al menos en esta temporada algún equipo no se tenga un estratega de habla hispana.

Con esto no quiero decir que haya discriminación, conste.

¿O sí la hay…?