ALFONSO ARAUJO BOJORQUEZ
Han pasado tantas cosas interesantes en el béisbol de Ligas Mayores y muchas de ellas se van al arcón de los recuerdos.
Tenemos el caso de que papá e hijo batearon jonrones seguidos.
Muy famosos los dos, pues fueron los Griffey, el Viernes 14 de Septiembre de 1990 en el Anaheim Stadium, que registró una entrada de 34,180, en un partido que duró 2.42 horas y los Angels de California viniendo de atrás, terminaron ganando 7-5 a los Marineros de Seattle. En el primer inning, vino la acción de padre e hijo. El pitcher Kirk McCaskill de los Angelinos, le da la base a Harold Reynolds y se presenta en la caja de bateo el gran Ken Griffey, papá y le pesca un lanzamiento y pone la pelota por arriba de la barda entre izquierdo y central. Los aficionados no se reponían del batazo de Mr. Ken, cuando vino el Junior del mismo nombre y por el mismo lugar, puso la pelota a la zona de jonrón, siendo el número 20 de la temporada. Muchos aficionados aplaudieron al dúo Griffey, pues nunca había pasado y también, nunca ha vuelto a suceder. Finalmente los fanáticos salieron contentos del parque porque la victoria le sonrió a los Angelinos con marcador de 7-5, contando con buen bateo, de nuestro conocido,

Dave Winfield, que pegó dos cuadrangulares, llegando a 19 en esa temporada. Papá Griffey se retiró al año siguiente, sumando 152 cuadrangulares, mientras el Junior jugaba hasta 2010, con un total de 630 jonrones...Después más lanzamientos. |