Nalo Vega aparece en la primera fila de arriba junto a la madrina del equipo.

Por Jesús Alberto Rubio.

Hace unos días falleció aquí en Hermosillo Leonardo “Nalo” Vega Galaz, una triste y sensible noticia que enluteció a su familia y al beisbol de esta región.

En igual forma a todos aquellos sus amigos/amistades que le conocimos y tratamos.

“Nalo” Vega fue parte del primer equipo de los Naranjeros cuando se inició en 1958-1959 la primera temporada de la Liga Invernal de Sonora, hoy Mexicana del Pacífico.

Se distinguió por ser un excelente bateador de poder.

Era de los peloteros más altos del equipo Naranjeros en aquella primera edición.

Ya retirado de la pelota profesional se dedicó a ser ampayer amateur en la pelota hermosillense, fuese beisbol o softbol.

Dicen que en ese rol siempre fue riguroso e imponía su autoridad y por lo tanto se ganaba la admiración y el respeto de todos los jugadores y aficionados en cada jornada.

Me dice Eradio Burruel, su compañero en aquel prime r equipo Naranja, que fuera del beisbol, en aquella época también fue encargado de los talleres de Carpintería en la Escuela de Artes y Oficios, ya desaparecida. Junto a él trabajaba su hermano Lalo y Pancho Camacho.

Varios títulos de bateo

Y como pelotero, Leonardo “Nalo” Vega también figuró como algo muy especial con su bat: en ligas amateurs locales, obtuvo varios campeonatos de bateo.

Buscando información sobre “Nalo”, encontré en Internet lo siguiente:

Nació en el barrio las Pilas de Hermosillo, Sonora, el 27 de octubre de 1932.

Se inició jugando béisbol a los diez años de edad, en el aún Colegio Sonora en el año de 1942 y a los 14 fue invitado a participar en una Liga de Beisbol Amateur fundada por los grandes impulsores del deporte rey, los Hermanos Galaz Vega, Antonio, Ricardo y Humberto, mismo torneo que se desarrollaba en el Campo del Barrio de las Pilas, frente a la calle Rosales.

Al parecer fue la primera Liga Interbarrial organizada en 1946 ya que participaban 4 equipos, La Matanza que fue el Campeón, Las Pilas, El Cerro y Equipo Morelos, resultando Campeón Bateador “El Nalo”, con un porcentaje de .465 a la edad de 14 años.

En el año de 1948 incursionó a la Liga en una Liga de Primera Fuerza, donde participaban los Equipos Cemento, Textiles, Cerveceros, Cooperativa “Cruz Gálvez”, 5 de Mayo y Rojos de “Las Pilas”, donde repitió como Campeón Bateador con .435 de promedio.

En 1949 participó en la Liga de Villa de Seris y nuevamente resulto campeón bateador con un alto promedio de .636; vio acción en varias temporadas en dicho circuito donde prácticamente fue su desarrollo como pelotero y en todo un ídolo en su barrio y sus alrededores.

En su paso por el béisbol participó en ocho estatales entre los años 1949-56 desarrollados en B. Hill, Santa Ana, Magdalena, Nogales y en esta capital.

Fue invitado en varias ocasiones a algunos Campeonatos Nacionales, los que no pudo asistir por diferentes causas, asistiendo únicamente en 1956 en Guanajuato.

Asistió también Campeonato Nacional Magisterial en 1974 en Guadalajara, Jal., siendo Jugador-Manejador, siendo Campeón.

A los 60 años de edad todavía participaba en la Liga de Veteranos, con el Equipo Club Obregón; también incursionó en el softbol en las Ligas organizadas en la ciudad…

Hasta aquí llegó el texto.

Fui su amigo, apreciándolo por su don de gente y he sentido su deceso, por lo que no podía dejar pasar más tiempo para dedicarle esta columna.

La última vez que lo saludé fue en uno de los corredores adyacentes a las instalaciones de El Colegio Sonora, junto a puestos de artesanías.

Antes, charlamos en corto en el Mercado Municipal No. 1 “José María Pino Suárez”, al lado de otros amigos de la misma época, peloteros en su mayoría.

Descanse en paz.